Tras un paréntesis prolongado pero, ante todo, necesario, vuelven nuestras tardes literarias en el IES Jorge Guillén.
Esta vez será con una bonita y conmovedora historia contada con la sencillez que caracteriza a esta escritora. Un episodio más de esa interminable guerra, por usar sus mismas palabras...
Para hablar sobre este libro y sobre todo lo que esta lectura te sugiera, te espero en la Biblioteca Remigio J. Aguayo, el MARTES 14 MAYO, a las 17´30.
Como todas las novelas de Almudena Grandes, esta también tiene la peculiaridad de atraparte desde la primera página. De este modo rompe con el prejuicio de muchos intelectuales hacia los best seller demostrando que se puede escribir muy bien, contar historias bonitas y conectar con la mayoría de los lectores. Me parece un libro original, dentro de los muchos que hay que tienen como trasfondo la posguerra, una historia escrita por una pluma dirigida por la sensibilidad y la empatía de la autora hacia las víctimas. Pero no hay maniqueísmo, a pesar de la evidente ideología de la autora. Es un libro sobre los muchos rostros de las víctimas y una de ellas fueron también muchos guardias atrapados en los cuarteles por el miedo y por las circunstancias. Creo que es una historia sobre el terror que se debió vivir en la España de los 40. Y veo una llamada hacia el futuro y la reconciliación a través de ese niño que, para mí, representa el alma no contaminada. Entrañable la relación de Nino con la maestra Elene que le descubre un mundo maravilloso a través de la lectura, la mejor herramienta para combatir los fascismos, los fanatismos, porque en el libro no se enfrentan posiciones ideológicas sino valores. Me encanta la figura de Pepe el Portugués, ese superviviente que encuentra su propio mdo de defender sus ideales. Pero no me he creido en absoluto el personaje de Sanchís.
ResponderEliminarMe gusta mucho Almudena Grandes. Creía que este libro era continuación de Inés y la alegría y que era necesario leer este antes de enfrentarme al que nos ocupa.Así que me alegré mucho al saber que eran episodios independientes. Recuerdo la esencia del libro. Enlaza con mi memoria histórica porque las historias contadas por mis familias y en el entorno de mis familiares tienen mucho que ver con esta historia. Me impactó saber cómo de pronto se prohiben cosas que han sido durante mucho tiempo la forma de vida de mucha gente, como la venta del esparto, la recova, etc... Me gusta la imparcialidad que busca la autora, pese a su afiliación política. Rompe con el esquema de la Guardia Civil estereotipada y te hace plantearte por qué tanta gente apoyó al régimen, comprendiendo que la mayoría lo que quería era sobrevivir. También me ha parecido un libro de maravillosos contrastes como ese Sanchís duro y cruel ante la gente y tierno y sensible con su mujer...
ResponderEliminarCReo que es una novela fácil pero ni mucho menos la mejor que he leído sobre esta etapa. Veo que está escrita para un público mayoritario, pero sin perder profundidad en su contenido. El tema principal es la acción de la guerrilla en los años 40. Pero lo más importante es que este tema está visto por los ojos de un niño (cuya madurez exagerada para su edad lo hace poco creíble). Yo me fijaría en la personalidad de ese niño forjada por tres influencias:
ResponderEliminar1.- Las vivencias contradictorias de sus propios padres y las vivencias en el propio cuartel en su relación con otros guardias.
2.- La amistad con Pepe, el Portugués, que representa la naturaleza y la libertad y que fundamentalmente le enseña a tomar decisiones.
3.- La enseñanza de Elena, la maestra, y su contacto con los libros. Para mí esta mujer encarna el protagonismo que en la novela adquieren las mujeres...
Esta novela es un retrato de la historia más reciente de nuestro país. Me ha recordado a otro libro leído en esta tertulia, Mi planta de naranja lima. Es la historia de un país dividido en dos bandos, una historia que a todos nos han contado, pero que Almudena Grandes ha sabido definir con un estilo muy preciso. Se trata de un país de sueños imposibles, sobre todo para aquellas señoritas que vivían de espaldas a la realidad. Solo aparecen pinceladas que no explican las razones de esa lucha. Nino representa el cambio, el futuro. Aparece la valentía de los guerrilleros. El final llama a la reflexión sobre el momento actual, sobre todo cuando se habla de que la guerra se perdió por un "error estratégico". Esto lo relaciono con el movimiento 15M y me doy cuenta de cómo siempre hay quien se encarga de que haya cosas que no triunfen...
ResponderEliminarSoy adicta a Almudena Grandes. Sus novelas siempre me han enganchado por su fácil lenguaje y su forma de contar historias. Lo más característico en sus novelas es que mete muchos personajes y tiene algunos principales pero un montón de secundarios. En esta novela para mí el principal personaje es el miedo. Se podría decir que es una novela más sobre la posguerra, pero yo la veo distinta porque lo analiza todo desde otro punto de vista. Son historias conocidas que a todos nos han contado alguna vez.
ResponderEliminarHay algo para mí muy importante y es la heroicidad de las mujeres, esas mujeres de negro que luchaban por sacar adelante a sus familias después de haber perdido a un ser querido. También quiero destacar el papel de Pepe, el Portugués, que ayuda al niño a salir adelante y de este modo representa un llamamiento a la vida.
Me pregunto si la situación de miedo que la novela describe no comienza a asemejarse a la situación que estamos comenzando a vivir últimamente...
Es el primer libro que leo de esta escritora y lo definiría como una historia real vista por un niño que descubre otra forma de ver el mundo a través de la lectura.
ResponderEliminarUna novela de aventuras en dos partes. Un narrador omnisciente que todo los abe y que me parece excesivamente maduro para esa edad. Dentro de la trama principal incluye subtramas que se mezclan con el hilo conductor de la narración y que me han hecho apartarme muchas veces de la historia. Usa muchos recursos lingüísticos y su riqueza en el lenguaje es indiscutible. Transmite mucho dramatismo, sobre todo cuando habla de ese sueño infantil perturbado por escenas de crueldad y violencia. Subraya la importancia de los libros como medio para dar el salto hacia un mundo mejor. Un tema muy importante es la niñez y la pérdida de la inocencia.
ResponderEliminarNovela entrañable y desoladora. Una historia de supervivencia en la niñez, como un ritual hacia la madurez. Ambiente asfixiante como si el tiempo se hubiera detenido y fuera imposible escapar. La ciencia-ficción de Julio Verne contrasta con la realidad que vive Nino. Hay una interconexión de personajes y una construcción de héroes como Pepe, el Portugués. Me parece una novela cinematográfica por su estilo descriptivo y me ha recordado a Cinema Paradiso y La vida es bella. Interesante el uso de la literatura como medio de evasión.
ResponderEliminarAlmudena Grandes es una de esas escritoras que no puedes no leer, señal inequívoca de que me entusiasma. Pero, afortunadamente, mis gustos no son incondicionales. Había sabido de esas historias por mis padres, ambos de Jaén.
ResponderEliminarMe encanta el principio de la novela describiendo el frío de esa tierra, y el final describiendo el calor. Las descripciones son geniales y me considero un apasionado de la forma de contar las historias. Por eso creo que esta escritora tiene la habilidad de describir objetos aparentemente insignificantes con tanto detalle y precisión que te hace el ambiente muchísimo más cercano.
Es capaz de describir el horror con tanto realismo que hace esta descripción aún más valorable.
He percibido algunas sutiles influencias lorquianas y me parece de un estilo muy moderno el escribir mezclando la historia con canciones.
He visto también en la novela reflejada la historia de la Institución Libre de Enseñanza y me ha conmovido la tortura a Fingenegocios y la forma que tiene este de salir de la situación con una entereza y heroicidad que muestra el triunfo ante la vida.
Sin embargo, le pongo "peros" a la construcción de ciertos personajes como Nino y como Sanchís. Sencillamente, no me los he creído.